domingo, 28 de noviembre de 2010

Silvio por Benedetti

En la víspera de un cumpleaños les dejo la opinión de Mario Benedetti.


Silvio por Mario Benedetti

Por muchas razones, y hasta sinrazones, Silvio Rodríguez es un cantante fuera de serie. Cofundador, con Pablo Milanés, Noel Nicola, Vicente Feliú, Eduardo Ramos, Sergio Vitier (y aunque nadie sabe quién la bautizó así) de la Nueva Trova, ha aportado su indudable prestigio a un movimiento que revitalizó la canción cubana y la catapultó en el plano internacional. No obstante, aún dentro de un núcleo tan fermental, con el que siempre se sintió plenamente identificado, Silvio es un talante inconfundible.

Curiosamente, su voz no es cálida ni grave ni particularmente seductora, sino más bien aguda, de un timbre casi metálico y sin embargo frágil. Al escucharlo, uno llega a temer que en cualquier momento se le quiebre, y ese riesgo ( que en su caso no es deliberadamente buscado sino más bien lo asume como algo irremediable) también forma parte de su extraño atractivo. Con características que en cualquier otro cantante serían anticarismáticas, Silvio funda precisamente su carisma. Quizá el secreto resida en que siempre transmite una gran sinceridad, una honestidad a toda prueba, un no aparentar lo que no es, y, en estos tiempos de famas prefabricadas, de engendros de la machacona y mistificadora publicidad, esa actitud, a la que el público accede sin intermediarios, significa una bocanada de aire fresco en un ámbito, como el del espectáculo, por lo común tan especulativo como artificial.

Salvo en casos excepcionales, Silvio es autor de la letra y la música de sus canciones. Como en los ejemplos de Pablo Milanés, Chico Buarque. Viglietti, Serrat, Aute y no muchos más, esa doble autoría otorga a sus producciones una unidad esencial. Sean o no el resultado de un desarrollo paralelo, letra y música aparecen como gemelas (jimaguas, diría en Cuba), copartícipes en el acto de la parición. Fundamentalmente, las letras de Silvio, sobre todo las que crea a partir de una duramente adquirida madurez, tienen un nivel textual tan afortunado que (algo no demasiado frecuente en los cantores populares) conservan su validez política aun sin el básico soporte de la música. Alguna vez he sostenido, y su trayectoria posterior corrobora ni diagnóstico marginal, que Silvio es un poeta que canta, y más aun: que es uno de los poetas más talentosos de su generación.

Siempre recordaré como conocí a Silvio y a Pablo en La Habana, allá por el año 1966. Era mi primera visita a Cuba. Unos amigos me habían invitado a cenar en su casa y me anunciaron que más tarde vendrían dos cantantes muy jóvenes, todavía casi desconocidos. Por fin llegaron con sus guitarras y cantaron cinco o seis canciones cada uno. Tuve la rara sensación de que asistía a un viraje importante de la canción cubana: por un lado estaba presente la tradición trovadoresca, y por el otro una propuesta asombrosamente innovadora, que transformaba, enriqueciéndolos, los ritmos heredados e insertaba en las letras un sentido tan comunicativo como el de la poesía conversacional, entonces en pleno desarrollo en América Latina. Varios años después, escuchándolos de nuevo en textos y música de más rigurosa factura, les pedí que cantaran aquellas letras primigenias que les había escuchado en el 66. Pero no las recordaban. Lo cierto es que en ese lapso habían creado tan frenéticamente nuevos cantos, que aquellos iniciales, tan importantes para mí, habían sido cubiertos por su propio olvido.

Este libro de Joseba Sanz tiene un valor inapreciable: inserta la obra del cantante en su vida, las sigue a ambas paso a paso, estrofa a estrofa. No es sólo una cronología ampliada, sino un curriculum espiritual, una efemérides de estado de ánimo. Por primera vez el oyente de Silvio podrá aquilatar no sólo una ruta artística sino también un recorrido vital. Podrá comprobar así que el mayor compromiso (palabra hoy tan subestimada por la dejadez postmodernista) de Silvio es con la vida, a la que no canta de lejos sino metida en ella hasta en los tuétanos. Participando en la campaña de alfabetización, embarcando hasta África en el barco pesquero Playa Girón, empuñando un fusil para defender su Revolución, arriesgando su vida en Angola, cantándole al amor desde el amor, aprendiendo a tratar de igual a igual a las mujeres de su vida, creciendo con sus hijos, la trayectoria de Silvio es el hilo conductor de su canto, y cuando los públicos, leales y fervientes, de cualquiera de los tres mundos, lo aplauden con denuedo y naturalidad, no sólo están premiando su arte, también su coherencia, su fidelidad a la Revolución y a sí mismo, su capacidad de trabajo y su rigor, su calidad humana. Silvio nunca será un mito; no viaja con su pedestal a cuestas. Sus públicos lo saben y tal vez por eso lo tratan como a un querido y sencillo compañero, que les canta y les dice las felicidades y las desdichas que ellos también quisieran cantar y decir tan entrañablemente como él.

Mario Benedetti

jueves, 25 de noviembre de 2010

FELICITACIONES MAESTRO!!!!!


Silvio Rodríguez sorprendido y honrado por Premio ALBA

El cantautor cubano Silvio Rodríguez confesó hoy aquí sentirse honrado por el Premio de las Artes 2010 que le confirió este miércoles el Fondo Cultural de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).

Es un honor y un orgullo que el ALBA, una congregación de países que se proyecta hacia un futuro mejor para América Latina, me haya otorgado ese galardón, subrayó el conocido artista en declaraciones a Prensa Latina en Madrid.

Junto al de las Letras, concedido al venezolano Luis Britto García, el Premio ALBA de las Artes por la obra de toda la vida fue dado a conocer hoy en La Habana en una ceremonia a la que asistió, entre otros, el ministro cubano de Cultura, Abel Prieto.

Visiblemente sorprendido por la noticia, Rodríguez, quien se encuentra en la capital española para asistir a un homenaje al maestro Leo Brouwer, exaltó la trascendencia del ALBA en el desarrollo de la cultura latinoamericana.

A su juicio, uno de los aportes más importantes de este esquema integracionista ha sido Telesur, cadena televisiva que, según su opinión, divulga nuestros puntos de vista o los de la parte digamos no sumisa de Latinoamérica.

Para el fundador del movimiento de la Nueva Trova, la información es parte esencial de la cultura, por lo que el nacimiento de esa televisora resulta seductor en un mundo en que la unipolaridad ha significado el predominio de sólo una parte de los criterios.

Es muy importante que los criterios se abran, que haya debate en cuanto a la visión de la realidad y en eso, remarcó, radica la trascendencia de Telesur.

El autor de “La era está pariendo un corazón” explicó a esta agencia que se encuentra en España para participar en el merecido tributo que la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) le dará mañana a su amigo Brouwer.

Mañana, el compositor, guitarrista y director de la isla caribeña recogerá en Madrid el X Premio SGAE de la Música Iberoamericana Tomás Luis de Victoria 2010.

Interrogado sobre sus planes, Silvio indicó que acaba de terminar la música de Afinidades, ópera prima de los actores Jorge Perugorría y Vladimir Cruz (Fresa y Chocolate), filme que se estrenará en el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.

Comentó, además, que sigue inmerso en el proyecto Meñique, primera película en tercera dimensión de dibujos animados que se hace en la historia de la cinematografía de la nación antillana.

Por último dijo estar también “metido musicalmente, y hasta un poco como actor”, en una película basada en una obra de teatro rusa titulada Y sin embargo se mueve (celebre frase de Galileo).

EL PREMIO ALBA

Esta distinción creada en el 2007 por el ALBA, es otorgada a creadores vivos que hayan avocado toda su producción a enaltecer el patrimonio cultural de Latinoamérica con aportes originales.

Igualmente, distingue a personas que de alguna manera enriquezcan los valores comunes de la región, así como también promuevan la descolonización y emancipación cultural.

Silvio Rodríguez, uno de los premiados, es el más grande representante de la trova cubana y uno de los músicos más importantes de América Latina.

En su discografía se distinguen piezas de gran notoriedad dentro del repertorio musical en lengua hispana como La era está pariendo un corazón, Te doy una canción y Sueño con serpientes.

Su producción más reciente, Segunda Cita, ha sido la más vendida en el pabellón de la Casa del Alba Cultural, en la VI edición de la Feria Internacional del Libro de Venezuela 2010 (Filven) que se llevó a cabo en la ciudad de Caracas.

Por su parte, Luis Brito García es un narrador, ensayista y dramaturgo de gran relevancia en Venezuela y el continente.

A lo largo de su carrera, Brito ha sido galardonado con el Premio Casa de las Américas en 1970 y el Premio Nacional de Literatura en 2002, entre otros.

El autor nacido en Caracas en 1940 ha escrito unos 60 títulos entre los cuales se encuentra Rajatabla, Los fugitivos, Vela de armas, La orgía imaginaria, Pirata y Abrapalabra.

Su más reciente obra el libro América Nuestra: Integración y revolución ha sido también el más solicitado en la Feria del Libro de Caracas.

El anuncio de los ganadores del Premio ALBA se hizo en la sede de la Casa Alba Cultural en la ciudad de La Habana donde estuvieron presentes el ministro de Cultura cubano, Abel Prieto; el viceministro de este ente, Ismael González y otros diplomáticos e intelectuales de la isla.

Además de Rodríguez y Brito, también han sido premiados con este galardón: el arquitecto brasileño Oscar Niemaeyer (Premio ALBA de las Artes en 2007); el escritor uruguayo Mario Benedetti ( ALBA de las Letra en 2007); y el letrado cubano Roberto Fernández Retamar (ALBA de las Letras en 2008), entre otros artistas y escritores latinoamericanos.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Sobre el asilo otorgado a Maria del Pilar Hurtado

Recojo este artículo publicado por el periódico panameño La Prensa, sobre el asilo otorgado por el presidente Ricardo Martinelli a la ex directora del DAS (Colombia) Maria del Pilar Hurtado.

Fue una ‘jugada política’ que favorece al ex presidente Uribe, dijo congresista

Cuestionan asilo a ex jefa del DAS
Dirigentes de partidos, analistas políticos y miembros de la sociedad civil sostienen que el Gobierno debe volver a analizar el tema.

José González Pinilla
Isidro Rodríguez

Un día después de que Panamá diera “asilo territorial” a la ex jefa del Departamento Administrativo de Seguridad de Colombia (DAS) María del Pilar Hurtado, investigada por el escándalo de espionaje a magistrados, políticos, periodistas y diversos sectores del país cuestionaron la medida tomada por el Gobierno panameño.

Hay quienes opinan que la decisión no tiene sustento jurídico y que el país podría estar violando diversas convenciones internacionales.

Uno de los que piensa así es el abogado y presidente del opositor Partido Popular, Milton Henríquez. “La Convención Americana de los Derechos Humanos señala que este derecho [el del asilo] no deberá ser invocado contra una acción judicial realmente originada por delitos comunes”, dijo.

Según Henríquez, esto quiere decir que no le corresponde darle asilo a la ex jefa del DAS porque se le sigue un proceso judicial por un delito común.

Magali Castillo, de la Alianza Ciudadana Pro Justicia, manifestó que es “decepcionante y preocupante e inaceptable”, la decisión que tomó el Gobierno, porque el asilo no puede ser para personas que son investigadas en sus países por violación a los derechos humanos.

Castillo añadió que es una vergüenza de siempre que Panamá reciba este tipo de personalidades, “apadrinando la impunidad”.

Mientras, el ex canciller Samuel Lewis Navarro sostuvo que resulta contradictorio que por un lado se otorgue asilo a una persona que está siendo procesada por “pinchazos” telefónicos y por otro lado, se condena y destituye a la ex procuradora general de la Nación –Ana Matilde Gómez– por haber ordenado interceptaciones telefónicas en investigaciones que se llevaban a cabo en el Ministerio Público.

Dijo que sería lamentable que existieran consecuencias adicionales como una demanda contra el Estado panameño por esta decisión.

De hecho, el senador colombiano Gustavo Petro –uno de los afectados- señaló que no descarta demandar a Panamá por proteger a Hurtado, según citó el diario El Tiempo.

El abogado constitucionalista Miguel Antonio Bernal argumentó que lo que llama la atención es que el asilo haya sido otorgado en “un abrir y cerrar de ojos”, cuando esto amerita ser analizado exhaustivamente.

El analista político Mario Rognoni sostiene que todo parece indicar que más que una decisión diplomática es política, que pudo incluir una negociación entre los dos Gobiernos. “Es mejor que un país amigo le dé asilo a una persona que puede ser llevada a juicio y revele detalles que podrían implicar a muchas personas”, aseguró.

En ese sentido, el congresista colombiano Iván Cepeda, miembro del Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado, afirmó –de acuerdo a DPA– que el asilo es una “jugada política” que favorece al ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), quien, a propósito, visitará Panamá esta semana.

Y es que Uribe fue jefe del actual presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.

Santos ocupó varias carteras en el gobierno uribista, una de ellas el Ministerio de Defensa (2006-2009).

VOCES CALIFICADAS

Es contradictorio que se dé asilo a una acusada de ‘pinchazos’ y por otro lado se condena a la Procuradora por algo igual”.
Samuel Lewis Navarro
Ex canciller

"Panamá está prestándose a una burla al sistema judicial colombiano al otorgar este asilo”.
Milton Henríquez
Presidente del Partido Popular

"A Panamá no le conviene estar pelado con Colombia. Se debe analizar a profundidad el tema”.
Guillermo Ford
Ex vice presidente de Panamá

http://mensual.prensa.com/mensual/contenido/2010/11/21/hoy/panorama/2409176.asp

martes, 16 de noviembre de 2010

Carta de don Álvaro, el papá de los tres niños masacrados por el ejército colombiano en Arauca

En nombre de la familia que me quedo después de la horrible masacre que me arrebato a mis tres hijitos y en el mío propio, saludo que las investigaciones estén avanzando y se lleven hasta las últimas consecuencias hasta que se sepa toda la verdad, aclarando que este documento lo redacte con mi puño y letra y le pedí el favor a un amigo que lo transcribiera en computador para hacerlo llegar a los medios de comunicación hablados y escritos y a las instituciones públicas.

Pido a la Fiscalía General de la Nación, al Presidente Juan Manuel Santos y a las Fuerzas Militares esclarecer totalmente los hechos y hallar a todos los responsables del crimen de mis hijitos y castigarlos con todo el peso de la ley. Al gobierno nacional y departamental que protejan nuestra integridad, la de los testigos y la de las comunidades y personas que con valor denunciamos estos horrorosos hechos, nuestra exigencia es que esto no se quede en la impunidad y que nunca vuelva a suceder un hecho de estos.

A la Procuraduría General de la Nación que adelante con más celeridad las investigaciones de carácter disciplinarias, cayendo en cuenta que los autores son integrantes de las fuerzas militares. Respecto al perdón quiero manifestar en nombre de mi familia y en el mío propio, que hasta que no se sepa toda la verdad y se haga real y efectiva justicia, se esclarezcan bien los hechos de lo sucedido, quienes fueron los autores materiales e intelectuales del horrendo crimen que me arrebato a mis tres hijitos, no perdonaremos.

A las fuerzas militares les digo que no habrá perdón ni olvido, que lo que exigimos es justicia, porque la masacre de mis tres hijos no la realizo un solo militar, ese crimen lo cometieron varios militares. Por qué dicen que hay 7 morrales cundidos de sangre, salivas y semen, el delincuente Raúl Muñoz dice que él hizo uso de las dos niñas de la de 13 años y de la hijita mía, pero por que ellas aceptaron, yo les pregunto a los señores de la fiscalía y a los militares, si sería que ella entonces estaría de acuerdo que la asesinaran a ella y a sus dos hermanitos, que eran mis queridos hijitos?.

Es falso lo que dice un general del ejército en un periódico, que organizaciones extrañas me tienen controlado y manipulado para que denuncie y enlode el nombre del ejército, será que con ese asesinato por varios militares ellos mismos no se enlodaron el nombre?. Por ultimo con el inmenso dolor en el alma y una cicatriz que nunca se me borrara le doy las gracias a las personas, a la comunidad de la vereda caño temblador donde vivía, a las veredas cercanas, a los derechos humanos, a los medios de comunicación y personalidades, que sean solidarizado con migo y mi familia y por ayudarme a denunciar la tragedia que me paso y que sigo viviendo.

Gracias.

JOSÉ ÁLVARO TORRES
Padre de los tres niños masacrados

Tomado de http://colombia.indymedia.org/news/2010/11/119123.php

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Segovia-Antioquia. 11 de noviembre de 1988

Se cumplen este 11 de noviembre, 22 años de una de las primeras masacres paramilitares ocurridas en Colombia, la cual se llevó a cabo como fue luego recurrente, ante los ojos de autoridades y fuerza pública, cuyas omisiones permitieron la acción. Desde el pasado 9 de noviembre, organizaciones sociales realizan en Segovia (Antioquia) -que fue el epicentro de la masacre- un encuentro minero, campesino indígena popular en conmemoración de ésta. El siguiente es un artículo periodístico publicado  por la revista Semana en noviembre de 1988 días después de la masacre.


A pesar de sus macabras dimensiones, la masacre del viernes 11 de noviembre de 1988 en la noche en la población de Segovia, Antioquia, le sonó a muchos colombianos como una historia conocida. Una vez más, hombres armados a bordo de camperos, entraban a sangre y fuego en una población que, en forma desprevenida, se preparaba para uno de esos largos fines de semana de tres días. Llovía a cántaros, pero los bares estaban atestados de clientes que, al son de la música de carrilera, apuraban los primeros tragos del viernes cultural. A ellos y a las gentes que conversaban bajo los aleros de las casas, los sorprendieron las primeras ráfagas de ametralladora, que iniciaron una noche de terror poco antes de las siete. Como si a los asesinos no les importara quién cayera, como si no hubiera objetivo preciso, la banda de criminales fue recorriendo las calles del pueblo, disparando y lanzando granadas. Gritos, de terror unos, de dolor otros, fue la única respuesta de los habitantes, incluyendo a los agentes del puesto de Policía que, según todos los testimonios, no reaccionaron ni pronta ni efectivamente.

Hora y media después, Segovia estaba convertida en un mar de sangre y su hospital declarado en emergencia. Más de 40 personas habían muerto y medio centenar más se encontraban heridas. Los que habían salido ilesos no se reponían del shock. Las madres buscaban a sus hijos. Las esposas, a sus esposos... En esa población de cerca de 20 mil habitantes, ninguno se libró de ser tocado por la tragedia. Cada uno tenía un pariente o un amigo entre las víctimas.

¿Qué había pasado? En medio de la conmoción y del caos, nadie atinaba a encontrar una respuesta. En la oscuridad de la noche, fue imposible ver los rostros de los atacantes. Además, éstos nunca se identificaron ni lanzaron consignas que pudieran dar una pista sobre su origen. Por eso, las primeras versiones fueron totalmente encontradas y absolutamente previsibles. Siendo esta una región de fuerte influencia de las FARC y el ELN, la primera reacción de las autoridades, representadas en la zona por el comandante de la XIV Brigada general Raúl Rojas Cubillos, fue atribuírle el ataque a la guerrilla. Aunque hace pocos años, una acción de estas, donde las principales víctimas son civiles y no media combate alguno, no hubiera resultado verosímil endosársela a la guerrilla, las circunstancias actuales, con antecedentes como el de Saiza, daban para aceptar como posible esta hipótesis.

Sin embargo, lo que no encajaba era el hecho de que una población con alcaldesa de la Unión Patriótica (7 de los 13 concejales son de ese grupo) y territorio político de ese movimiento, pudiera ser presa de semejante agresión por parte de la guerrilla. De ahí que, el sábado en la mañana, comenzara a coger fuerza la idea de que el ataque había sido perpetrado por un grupo paramilitar.

La sombra de Castaño

Esta versión tenía asidero en múltiples antecedentes. Segovia, el primer municipio en producción de oro del país, a 240 kilómetros de Medellín en el nordeste antioqueño, fue durante muchos años uno de esos pueblos donde, como en la zona bananera obreros oriundos de la región trabajaban a órdenes de una compañía norteamericana y extraían riqueza a manos llenas, en medio de las más infrahumanas condiciones de vida y de trabajo. Fue esta situación y el olvido a que fue sometida la región tanto por el Estado como por los dirigentes políticos de los partidos tradicionales, lo que permitió que se convirtiera en un fortín de grupos legales y armados de la izquierda, que encontraron auditorio y respaldo entre sus explotados habitantes.

Desde entonces, los segovianos, como sucedía con sus vecinos de Remedios y de otros municipios del área comenzaron a estrechar lazos, primero con el Partido Comunista, y luego con la guerrilla. Como consecuencia del proceso de paz y del surgimiento de la UP, no resultó extraño que la mayoría de sus habitantes apoyara en las urnas a los candidatos de este nuevo movimiento político. Pero paralelamente al boom de la izquierda en la región, y seguramente como respuesta a los muchos abusos (secuestro, extorsión, boleteo, etc.) de los frentes guerrilleros a los hacendados, empresarios y comerciantes, se dio otro boom: el de los grupos de auto defensa, que luego, con la agudización de los conflictos, se convirtieron en verdaderos ejércitos de paramilitares.

Un siniestro personaje detrás de estos grupos en la zona comenzó a hacerse conocer en el área de Remedios, Amalfi y Segovia. A comienzos de esta década, una matanza de 18 personas de una misma familia en la vereda El Largato, en Amalfi, fue atribuída a un tal Fidel Castaño. Poco se supo de él entonces. Apenas, que había manejado una mina y luego se había hecho amigo de gentes del Cartel de Medellín, en particular de Gonzalo Rodríguez Gacha, "El mexicano".

Furibundo anticomunista, su padre había muerto, al parecer de un ataque cardíaco, cuando permanecía secuestrado por un frente de las FARC y después de que Castaño hubiera pagado diez millones de pesos por su rescate. A raíz de esa tragedia familiar, organizó uno de los primeros grupos paramilitares de que se tenga recuerdo. Reclutó a algunos de los trabajadores de su hacienda para entrenarlos en la lucha contraguerrillera. El grupo cobró fama porque operativo que emprendía, operativo que lograba su objetivo: liberaba secuestrados sin necesidad de pagar rescates, "limpiaba" de extorsionistas veredas enteras y ofrecía servicios de seguridad a quien estuviera dispuesto a contribuír a su causa con una suma de dinero.
La fama de Castaño se extendió a otras regiones del país y su nombre alcanzó las primeras páginas de los periódicos, cuando hace once meses se le vinculó a las horrendas masacres de las fincas "Honduras" y "La Negra" en Urabá. El "Rambo criollo", como se le empezó a conocer, no ha podido ser localizado por las autoridades que, por boca del DAS, lo acusaron formalmente de las mencionadas matanzas de Urabá.

Por todos estos antecedentes, en Segovia hay quienes creen que nada tendría de raro encontrar a Castaño detrás de la masacre del viernes. De hecho, muchos segovianos temían desde hace tiempo, que algo así podía suceder. "Desde hace meses, se estaba anunciando una masacre por aquí. Ese grupo que se llama 'Muerte a Revolucionarios del Nordeste' ha pasado volantes debajo de las puertas, pintan las paredes amenazando. Desde hace como un año, dijeron que cualquier día habría una masacre", afirmó a la prensa un comerciante de la vecina población de Remedios, que no quiso identificarse. Pero no solamente Remedios, sino también Segovia, El Bagre y Zaragoza, todos ellos afines a la UP, se han visto inundados con las mismas hojas volantes. En ellas, se amenaza de muerte a dirigentes, militantes y activistas de izquierda de la región. Precisamente en marzo, cuando fue asesinado en Medellín el primer acalde popular de Remedios, Elkin de Jesús Martinez, circuló un volante con el siguiente texto: "Como lo habíamos anunciado en anteriores mensajes, hoy damos un parte de victoria con nuestra tarea de limpieza, la cual hemos iniciado con Elkin de Jesús Martínez, alcalde electo de la UP para Remedios., Sus vínculos con las FARC y demás grupos guerrilleros que han mantenido en zozobra al pueblo del nordeste antioqueño, han provocado de nuestro movimiento, un accionar concreto y decidido, en aras de poner fin a los planes expansionistas del comunismo encabezado por las FARC-UP en esta rica y próspera región del país". Firmaba el documento, el grupo MRN ("Muerte a Revolucionarios del Nordeste").

La bola de nieve

A las pocas horas de conocida la tragedia de Segovia, la pregunta que se hacían los colombianos giraba en torno a dónde demonios y qué demonios estaban haciendo la Policía y el Ejército cuando se produjo el ataque. Existen numerosos testimonios según los cuales, durante la hora y media de sangre y fuego, no se vio un uniformado en cuadras a la redonda. Y se sabe que ni el puesto de Policía ni el Batallón Bomboná, a poca distancia del lugar, fueron blanco del ataque.

Lo anterior no hace mas que alimentar las sospechas -que en casos como el de las matanzas de Urabá se han demostrado- de que por acción u omisión, las autoridades militares de algunas regiones del país estarían auspiciando las actividades de los grupos paramilitares, empeñados en una especia de "guerra santa" contra todo lo que huela a izquierda. Si estas inquietudes no se aclaran, cobrarán fuerza interrogantes como los planteados hace pocas semanas por parlamentarios de la UP en un debate a varios ministros, en los cuales se le preguntó al gobierno por qué, si como el propio ministro de Gobierno, César Gaviria, lo afirmó, se han detectado más de 14 grupos paramilitares, el gobierno no ha hecho nada para desmontarlos o, cuando menos, combatirlos.

Pero además de la responsabilidad que en este tipo de acciones le pueda caber al gobierno y a sus Fuerzas Armadas, a la guerrilla también hay que pasarle su cuenta de cobro. Empeñada en una estrategia también de sangre y fuego para convencer a todo el mundo de que no está derrotada militarmente y para obligar al gobierno a un negociación directa, lo que ha hecho es exacerbar los ánimos y polarizar las fuerzas, contribuyendo a que se desmadre definitivamente el río de sangre que está recorriendo a Colombia. No en vano, 19 masacres como la del viernes se han cometido en lo que va corrido del año. Ante la creciente actividad guerrillera y la impotencia de la Fuerzas Armadas para detener esta avanzada, los grupos de paramilitares -que antes cumplían misiones específicas en regiones específicas- parecen estar actuando dentro de un plan nacional de respuesta a la guerrilla, contando con generosa financiación. "Son organizaciones que empiezan a contar con la simpatía y el apoyo económico de los terratenientes más reaccionarios de cada región del país", dijo en reciente entrevista a El Tiempo, el director nacional de Instrucción Criminal, Eduardo Lozano. Lo más grave de todo es que estos grupos, sólo en casos excepcionales, como el del rescate de manos del ELN de dos funcionarios de la Defensa Civil el sábado pasado, se enfrentan directamente con la guerrilla, pues hasta ahora lo que han hecho es descargar sus iras en la indefensa población civil, cuyo único pecado ha sido militar en movimientos o partidos distintos del liberal y el conservador.

Cuando aún no se han acabado de enterrar los muertos de Segovia, parece evidente que el país se está encaminando hacia una nueva, más intensa y más macabra etapa de la guerra, produciendo un efecto como de bola de nieve en el cual dos bandos cada vez más radicalizados, se enfrentan en un conflicto ya casi territorial, donde los habitantes de toda un área son asimilados a uno u otro de los bandos, convirtiéndose así en potenciales víctimas. Todo esto mientras el gobierno y el resto del país parecen limitar su papel al de convidados de piedra.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Sobre la "neutralidad" y la indiferencia

Leyendo un libro de Karlheinz Deschner titulado Historia criminal del cristianismo, encontré este pasaje:

El que no tiene por enemigos a muchos, es enemigo de toda humanidad. Y quien pretenda contemplar la historia sin ira ni afectación, ¿no se parece al que presencia un gran incendio y ve cómo se asfixian y abrasan las víctimas sin hacer nada por salvarlas, limitándose a tomar nota de todo? El historiador que se aferra a los criterios de la ciencia «pura» es forzosamente insincero. O quiere engañar a los demás, o se engaña a sí mismo. Diría más, es un delincuente, porque no puede haber delito peor que la indiferencia. Ser indiferente es facilitar el homicidio permanente.

Tomado de Deschner, Karlheinz. Historia criminal del cristianismo, Vol. I. Barcelona: Ediciones Martínez Roca. 1990. PP. 51.